Como hemos visto durante el proyecto, del olivo obtenemos zumo de aceitunas: el aceite; pudiendo ser de distintas variedades, por lo que para probarlos y diferenciarlos hemos organizado una cata de aceites de la marca andaluza Hojiblanca.
Los aceites monovarietales que hemos probado han sido:
- Esencia hojiblanca.
- Variedad arbequina.
- Variedad cornicabra.
- Variedad verdial.
¿Cómo hemos catado el aceite?
La temperatura de cata del aceite de oliva era de 28º C, temperatura que permite la volatilidad de los compuestos aromáticos en un líquido denso y graso como es el aceite.
Para probar el aceite de oliva hemos colocado cada muestra en una recipiente para poder oler y degustar. Y entre cada cata de aceite, para quitar el gusto de la muestra anterior, hemos comido un pedazo de manzana y bebido un sorbo de agua.
La cata ha comprendido las siguientes fases:
- análisis visual
- análisis olfativo
- análisis gustativo
- análisis táctil
- equilibrio, armonía
- Mover el vaso para impregnar sus paredes.
- Introducir la nariz en el vaso para percibir los aromas del aceite.
- Percibir el frutado de aceituna y los aromas a manzana, hierba, tomate...
- Probar el aceite introduciendo un poco en la boca de manera que impregne toda la cavidad bucal.
- Percibir los atributos de amargo (en la parte posterior de la lengua), picante (en la garganta) y dulce (en la parte delantera de la lengua).
- Aspirar aire por la boca para percibir otros aromas, si bien al tratarse de aceite de oliva virgen extra no se deben percibir aromas o sabores extraños (rancio, avinado, atrojado...) que indiquen que se trata de un aceite defectuoso.
Para realizar el registro de la cata hemos utilizado la siguiente plantilla:
No hay comentarios:
Publicar un comentario